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El bidegorri de Aiete se abre camino

El carril-bici se ha convertido en la primera prioridad de la vecindad -como mostró en la reciente votación sobre los presupestos- y de la Asociación Lantxabe -impulsora de la participación-. Con mucha lentitud se van dando pasos que nos acercan el soñado espacio de movilidad sostenible, de tal manera que la gente de Aiete pueda tener acceso al uso de la bicicleta, como tiene cualquier habitante de la ciudad llana de Donosti.

Esta mañana el departamento de movilidad nos ha dado a conocer su nuevo proyecto de bidegorri. En concreto el del primer tramo que va desde el ambulatorio/ascensor hasta la glorieta de las Jesuitinas.

Queda por diseñar el segundo tramo del proyecto, el que une las Jesuitinas con el bidegorri que viene desde el paseo de Oriamendi. Y un tercer tramo, el que va desde el ambulatorio/ascensor hasta ‘La Cumbre’, que fue votado mayoritariamente por la vecindad de Aiete e incorporado a los presupuestos de 2019.

El ‘nuevo proyecto’ es básicamente el que ya se conoce e hizo público Lantxabe, de ahí el entrecomillado.

La Asociación reivindicaba que tanto bidegorri como acera fueran derechos, seguidos, llanos. Esta prioridad no era contemplada en el proyecto inicial. Sin embargo, hace unos meses, en una cita anterior, los técnicos de movilidad sostenible hicieron suya la propuesta de Lantxabe. En este tiempo los especialistas municipales  has seguido estudiando el nudo gordiano del problema -rodeado por un círculo verde en el dibujo- y  han trazado la solución que, con tan deficiente mano, se traza en el plano.

Los citados expertos conservan lo esencial de la idea de Lantxabe, pero permitiendo a los automóviles  que circulan por el paseo de Aiete en dirección ‘centro’, dar el giro a la altura de Solbes y desde allí, girando a la derecha por la Goiko Galtzara, tomar la Gregorio Marañón.,

Como se ve, los coches siguen sin poder acceder directamente a la Gregorio Marañón a la altura del nudo Plaza-Museo de Munto, pero sin tener que rodar hasta la rotonda de ‘La Cumbre’. Tal calle, entre Goiko Galtzara y Paseo de Aiete se señala como dirección única. Y en su salida, a la altura del Paseo, se coloca un semáforo. De esta suerte bidegorri y acera toman una forma incluso más lisa y rectilínea que en la trabajada idea anterior .

El departamento de movilidad sostenible añade otras medidas al nuevo proyecto, como una zona de ‘carga-descarga’ a la altura de ‘Solbes’ con el objeto de evitar la doble fila.

Posteriormente se afinarán más idea y dibujos

Polifónicas andaluzas, la sorpresa que enamoró al público asistente en el Aiete Kantuz

Los propios organizadores no supieron, hasta casi la víspera, que la ‘Betiko Ametsa’ de Irun, había cedido su espacio a dos polifónicas andaluzas. Lantxabe era desconocedora de la potencia de la coral de ‘Isla Cristina’ de Huelva y de la ‘Tomares’ de Sevilla, que sumadas, multiplicaron sus deslumbrantes efectos. Las notas del canto y sus canciones eran música celestial y tenían la fuerza de más de 70 documentadas y poderosas voces

El festival lo inició la agrupación Cum Jubilo, completando una magnífica intervención. Las chicas y chicos de Sergio Pedrouso, de día en día, van afinando su estilo y consiguen una coral de empaque.

La participación estelar de Txaro Gual, acerca la agrupación al público y la audiencia gana en cercanía y en divertimento

La tarde del sábado, día tres, tras esta intervención de la Cum Jubilo de Sergio Pedrouso (coro Easo), las personas integrantes de las Polifónicas ‘Isla Cristina’ de Huelva y ‘Tomares’ de Sevilla colmaron la Parroquia de Aiete, desbordaron todas las previsiones, por el número de componentes, nada habitual, y por su calidad y empatía interpretativa.

La Iglesia se llenó de gente, que disfrutó  de las corales polifónicas. Como se ha dicho son alrededor de 75 voces que suenan al unísono bajo la dirección de Vicente Sanchís Sanz. En la Iglesia el canto vocal cuenta con una excelente acústica

Ambas agrupaciones tenían especial deseo de actuar en Donosti y nos regalaron, además de canciónes de su repertorio, como la dramática ‘Lacrimosa’; la ‘Salve Rociera del Olé‘, versión coral de su director Vicente Sanchis Sanz, y, las más jaraneras, ‘Júrame’ o ‘Prende la vela’, una magnífica coral de ‘Andaluces de Jaén’ de Miguel Hernández; pero el entusiasmo llegó al paroxismo con magníficas versiones, y toques de gracejo andaluz, del ‘Haurtxo Txikia’ y del ‘Agur Jauna’, esta última se escuchó con el auditorio puesto en pie.

La iglesia rompió en una fuerte ovación, pidiendo más, al impresionate conjunto de voces que integran las dos corales

Las Polifonías citadas están sabiamente dirigidas -y con mucho sentido del humor- por Vicente Sanchis y Virginia Peña, que también es solista. Otros solistas que actuaron son Sara Cáceres, Esther Repiso, Luis Cueto, José. M. Rivero, Manuel Rodríguez

Al final de los conciertos, la organización entrega un recuerdo del primer ‘Aiete Kantuz’, a cada  coral participante

Las próximas citas son el viernes 9 noviembre, a las 19:30, en el Colegio Mayor Aiete, con los Coros ‘Capilla Gregorianista Masculina, Donosti Ereski’ y Eresmin Abesbatza’

Y el sábado 10 noviembre, a las 20:30, en la Parroquia de Aiete, con los Coros de las Parroquias del Antiguo y de Aiete y la Eskola-Gurutziaga Abesbatza.

Se espera que este final abra las puertas al próximo Festival Coral de Aiete, el que será segundo, porque estos maravillosos conciertos no han dejado a nadie indiferente. Era difícil lograr una mejor actuación en lo que ha sido el arranque con el primer festival ‘Aiete Kantuz’

La vida interna del ‘Aiete Kantuz’

Aiete es como un ‘Festival de Coros de Tolosaen txiki, pero la participación, la duración -tres semanas-, la calidad y la seriedad, es su versión de barrio, están rayando a mucha altura

Participan, 12 coros, varios de Aiete, del Antiguo…y de Isla Cristina (Huelva) y Sevilla

El festival coral, que celebra este su primer año, vivió el pasado sábado tres de noviembre, una jornada única, con tres coros, uno partido en dos, de primerísimo nivel, que pusieron la carne de gallina a las personas que llenaban la Iglesia de Aiete. Este es nuestro ‘Festival de Coros de Tolosa’, con menos pirotecnia pero tanto corazón o más.

Fue una velada especial. En la acogedora iglesia, inaugurada por Fray Zacarías, obispo de Vitoria, el 14 de septiembre de 1926, y cuyo primer capellán fuera Cecilio Aguirre Isasa, se juntaron un coro y dos polifonías de ensueño. La gente que tuvo la suerte de asistir al concierto, la mayoría aietearras, no podía estar más feliz.

La gente comentaba, quizás por el entusiasmo despertado, que el nivel coral había sido histórico, pero lo más bonito es el mensaje de convivencia que se traslada en esta jornada: vascos y andaluces interpretando juntos, unos, los de aquí, letras andaluzas, y los otros, los de Sevilla y Huelva, el ‘Haurtxo polita’ y el ‘Agur Jauna’. Daba gusto ver a los vascos con los andaluces, unidos por el lenguaje común de la música. Las gentes de culturas tan lejanas se reunieron en la Iglesia, todo un mapamundi en torno al canto.

En ese ambiente no es extraño que la interpretación, por las corales andaluzas, de una obra vasca, el ‘Haurtxo polita’, haya sido la más celebrada de las interpretadas hasta ahora.

En la velada fluyeron con naturalidad el euskera, el castellano y el andaluz, aunque fue la música la que envolvió todo. Por el escenario desfilaron los tres coros: el Cum Jubilo, de Sergio Pedrouso y las dos Polifonías fundidas, la de ‘Isla Cristina’ y la de ‘Tomares’ (más de 70 voces corales)

El mundo de la música disfrutó de una velada excelente. Lo decían las componentes, mayoría en todos los coros, y los componentes: Hemos disfrutado participando y escuchando, y aplaudiendo. El público se puso en pie para escuchar el ‘Agur Jauna’ y una versión del himno de Andalucía, entonados por las Polifónicas. El coro vasco participante, se declaraba más que satisfecho por haber compartido con los andaluces un recital de este nivel.

Negaron la sala Ghandi del palacio de Aiete para el ‘Aiete Kantuz’

A una solicitud formal, metida por registro municipal, tras hablar con los responsables técnicos del Palacio, se recibió una contestación telefónica verbal que decía ‘las salas del palacio sólo se ceden a actos que tengan relación con la paz’

Imagínense la humillación de los convocantes del ‘Aiete Kantuz’, que son los mismos que han hecho posible la construcción de la casa de cultura y el uso civil del palacio. Ahora se cumplen 10 años de aquella asamblea que pegó un puñetazo en la mesa, reivindicando ‘Una Casa de Cultura en el Palacio de Aiete’

¿Saben los gestores del palacio el significado que une música coral y paz?

¿Son conscientes de la importancia de la canción vasca en la lucha por la libertad?

Su respuesta hace pensar que no.

¿Por qué siempre ganan el Certamen Coral de Tolosa las agrupaciones bálticas? «La música coral forma parte de nuestro ser», contaba el director ganador de este año, Aivis Greters. ¿Les suena?

Vicente Sanchís, director de las Polifónica de Tomares y de la Coral Polifónica ‘Isla Cristina’ explicaba la razón de su interés por participar en el ‘Aiete Kantuz’: “la música coral vasca está firmemente enraizada en Euskadi. Venimos a aprender” afirmaba el sábado antes de su exhibición en Aiete

¿Saben estas personas del palacio de Aiete que la Revolución Cantada es un término para referirse a los sucesos ocurridos entre 1987 y 1991 que concluyeron con la reinstauración pacífica de la independencia de los estados bálticos: Estonia, Letonia y Lituania?

El término fue acuñado por el activista estonio Heinz Valk, quien lo utilizó en un artículo sobre las manifestaciones de junio de 1988 en el Auditorio de la Canción de Tallin (Lauluväljak), donde se cantaban canciones patrióticas estonias para reivindicar la independencia del país.

Un punto de inflexión en los movimientos populares fue la celebración del tradicional Festival de la Canción Estona (Laulupidu) de junio de 1988. Cerca de 100.000 personas cantaron himnos y canciones patrióticas, algunas de ellas prohibidas. En septiembre del mismo año, el Frente Popular organizó otro festival musical en Tallin (Eestimaa laul) al que asistieron cerca de 300.000 personas, lo que suponía una quinta parte de la población. La naturaleza artística de las marchas propició que Heinz Valk acuñara el término «Revolución Cantada» para referirse a la situación política del Báltico.

En los países bálticos, el canto coral es importante desde el punto de vista académico musical. Los directores son profesionales. Existe una estructura sólida y asentada en los conservatorios, donde a los niños se les enseña música coral al mismo nivel que la instrumental. Hay planes de formación, también tienen importancia las capillas corales, y existe una profesionalización estructural de la música coral, aunque las agrupaciones sean aficionadas. También influye el clima. La vida no puede darse en la calle y la gente tiene la costumbre de concentrarse en centros cívicos culturales, donde la música coral tiene mucha importancia.

Esta imagen se puede trasladar al Coro Easo o al Orfeon Donostiarra.

La imagen de la música coral se puede asociar a la paz y, en consecuencia, debería tener abiertas las puertas del Palacio de Aiete.