Las instalaciones deportivas de PUIO LANBERRI cuentan con un presupuesto de 2,7 millones y , definitivamente, tendrán un campo de rugby que también servirá para jugar a fútbol. Dispondrá de un graderío cubierto con capacidad para 120 personas, además de cuatro vestuarios, aseos, cafetería, gimnasio y tres locales que servirán como oficinas.
El pasado 25 de enero se abrió el plazo de presentación de candidaturas para hacerse con la gestión de este recinto.El plazo para presentarse a concurso finaliza el día 15 de este mes.
El recinto debería haberse rematado en enero, pero acumula un retraso que le llevará, como pronto, a ponerse en marcha en marzo.
Actualmente, sigue sin colocarse el césped de hierba artificial sobre la explanada. Los operarios esperan a que cesen las lluvias para ejecutar esta operación y las labores, entre tanto, se concentran en el edificio de vestuarios e instalaciones y las zonas aledañas.
El encargado de gestionar estas instalaciones percibirá una compensación económica anual máxima de 16.473,30 euros y la concesión durará cinco años. El Bera Bera es el único club que, por el momento, ha confirmado su intención de presentarse. Sobre él están puestas todas las miradas, ya que el campo se ha diseñado pensando especialmente en el rugby, en detrimento del jockey. Ni para una cosa ni para la otra se ha contado con las Asociaciones de Vecinos del barrio, ampliamente representativas y con años de actividad a cuestas.
Las bases exigen a los licitantes un proyecto que contemple la gestión del bar, de la publicidad estática, del alquiler de dos locales que podrían ser utilizados por otras entidades y la equipación del gimnasio, que requiere de una inversión de 30.000 euros para obtener la máxima puntuación en ese apartado.
Estas obras provocaron un derrumbe de un muro de contención y la posterior caída del jardín de la villa situada a 50 metros de estas instalaciones, en el camino de Juanistegi, en Aiete debido a las fuertes vibraciones que provocaban las máquinas en las obras de Puio Lanberri.