Archivo de la etiqueta: Cine y Literatura

Jueves: Tarde de tertulia «Anna Karenina» con Lola Arrieta

Lugar: Casa de Cultura de Aiete

Para George Steiner, la época literaria de Tolstoi y Dostoievski constituye, junto a la de Platón en la Grecia clásica y a la de Shakespeare, los tres momentos cumbre de la historia de la literatura occidental. Se puede compartir o no hasta el final la opinión de este reconocido experto en literatura comparada, pero lo que sí podemos afirmar es que Tolstoi y Dostoievski, con sus diferencias, son dos de los mejores novelistas de todos los tiempos.

 Leon de Tolstoi (Yasnaia Poliana, 1828 – Astapovo, 1910) escribió entre 1875 y 1877 Anna Karenina, la novela que va a ser objeto de nuestra tertulia. Esta obra, considerada una de las novelas cumbre del realismo, se ha adaptado al cine en varias ocasiones, entre ellas hemos escogido la dirigida en 1935 por Clarence Brown, con Greta Garbo y Fredric March, para nuestra proyección.

Anna Karenina, se ha dicho y repetido, es una novela de amor, una de las mejores que jamás se han escrito. Es la historia de amor entre Anna y Vronski, pero también la de Levin y Kitty y la de Dolly y Stepán. Es, por tanto, el amor vivido desde un prisma plural, desde distintas perspectivas, dándonos una visión rica y compleja del mismo, en un afán de acercarse a la realidad con los instrumentos que sólo posee el arte, en este caso la narrativa.

 Anna Karenina es, también, un magnífico retrato de esa Rusia de la segunda mitad del siglo XIX, del mundo de la aristocracia privilegiada y ociosa y del mundo del campo, ese campo tan amado y que tan bien conoce Tolstoi. Son mundos descritos con maravilloso detalle, tanto en lo que se refiere a los espacios externos como en la interioridad de los personajes, utilizando para esto último técnicas literarias de gran expresividad y modernidad, en las que las voces de los personajes, hablándonos desde su propia mente, nos introducen en su mundo interior.

 La historia de Anna es, una vez más, una historia de búsqueda, de deseo insatisfecho que termina estrellándose en esa estación de tren en la que la muerte está esperando. Y será Levin, personaje en el que escuchamos muchas de las ideas del autor, el que continúe el camino, buscando, en su afán de abarcar la totalidad, un sentido a la existencia, que el llamará “el sentido del bien”.

 En Lievin como en Tolstoi los términos se vuelven borrosos, “Dios” se sustituye por el “Bien” y este último será sustituido por el amor entre los hombres. Es la senda del pacifismo, de la espiritualidad, un camino complicado y contradictorio que no excluye a nadie, que cuesta definir con palabras, pero al que Tolstoi intentó acercarnos cuando escribió para todos nosotros Anna Karenina.

Proyección de «Madame Bovary»

Fernando presenta la película

La asociación de vecinos de Aiete ha trasladado su ciclo de literatura y cine al nuevo espacio bajo el palacio

El ciclo de Literatura y Cine que organiza la asociación de vecinos de Aiete Lantxabe se ha trasladado a la recién inaugurada casa de cultura, bajo la explanada del Palacio de Aiete. Así, el pasado jueves allí se realizó la tertulia literaria sobre la novela y el viernes 11 se proyó la película Madame Bovary, de V. Minelli . (En versión original con subtítulos en castellano y partir de las 18.45 horas).

Lola Arrieta, dinamizadora de la tertulia, apuntaba que «Madame Bovary es una historia de amor triste y grandiosa». Y añadía que en ese sentido se asemeja a la próxima emisión que incluirá el ciclo organizado por Lantxabe, que debatirá -los próximos 10 y 11 de Marzo- en torno a Ana Karenina, de León de Tolstoi: «Su empeño, su búsqueda, la de Ana y la de Emma, ¿no son acaso la de cualquier ser humano, la de nosotros mismos, aunque estemos alejados de ellas en el tiempo y en el espacio?».

Noticias de Gipuzkoa

La fuerza de Madame Bovary

El ciclo de Literatura y Cine analiza la obra literaria de Gustave Flaubert.

Tertulia de ayer moderada por Lola Arrieta

Se proyectó en la Casa de Cultura la adaptación cinematográfica de Minelli

11.02.11  GORKA LARRUMBIDE | SAN SEBASTIÁN.

El ciclo de Literatura y Cine se centra en este primer trimestre de 2011 en el análisis de tres obras literarias cuyas protagonistas se han convertido con el paso del tiempo en personajes clásicos universales. Si en el mes de enero ‘La princesa de Cleves’ de Madame de Lafayette era el motivo de su estudio, en este mes de febrero se analizará la figura de Madame Bovary, de Gustave Flaubert, novela escrita en 1856 y llevada al cine en numerosas ocasiones, entre ellas, la destacada adaptación del director Vincente Minelli (1949) y que esta tarde será objeto de estudio, en la Casa de Cultura, por Fernando Mikelajauregi tras su proyección.

«Si la novela de ‘Madame de Lafayette’ parecía querer ponernos en guardia ante los peligros y riesgos del amor, dos siglos más tarde, Flaubert crea una heroína que camina en la dirección contraria, que busca con pasión a lo largo de su existencia ese amor ideal, con mayúsculas, de cuya existencia sabe por las lecturas románticas que han llenado su infancia y su juventud, y que ella se empeña en hallar en esa Francia profunda a la que pertenece», asegura Lola Arrieta, quien ayer mismo analizó en tertulia esta obra ante un numeroso público que, como viene siendo habitual, lee en profundidad las novelas para compartir impresiones con otros curiosos lectores.

Emma es una inadaptada a su entorno, a su matrimonio, a su maternidad. Su imaginación le ayuda a salir de la Normandía enfangada y a elevarse en la búsqueda de ese ideal de amor romántico. Pero fracasará y sólo en el último momento se dará cuenta de lo vano de su empeño. Este argumento queda fielmente reflejado en la película que dirigió Vincente Minelli y que será el motivo de análisis esta tarde, a las 18.45 horas, tras la proyección de la cinta. Según la crítica, Minelli supo darle «la carga de encanto y desesperación que la historia requería».

El ciclo de Literatura y Cine, que viene celebrándose en Aiete desde hace ya cinco años y que dirigen Lola Arrieta en la parte literaria y Fernando Mikelajauregi en lo estrictamente cinematográfico, se trasladó a principios de año a la recién inaugurada Casa de Cultura de Aite. Tras pasar con éxito por antiguos enclaves como el Topaleku de los jardines del palacio o el caserío Katxola, la Casa de Cultura toma el testigo con el fin de impulsar las nuevas instalaciones, mucho más cómodas en cuanto a volumen y a su capacidad para ofrecer mayor comodidad a sus usuarios.

Este cambio de ubicación se vio confirmado en la primera tertulia celebrada el pasado mes de enero a la que acudieron más de cuarenta personas, llenando el aforo de 120 butacas durante la proyección de la película.

“’Madame Bovary’ es una historia de amor triste y grandiosa, como lo es la novela que analizaremos en nuestra próxima tertulia, ‘Ana Karenina’, de León de Tolstoi, y su empeño, su búsqueda, la de Ana y la de Emma, ¿no son acaso la de cualquier ser humano, la de nosotros mismos, aunque estemos alejados de ellas en el tiempo y en el espacio?”

Madame Bovary, Aiete Kultur Etxean

 Aieteko Lantxabe Elkarteak literatura unibertsalaren hiru emakumeri eskainiko dio literatura eta zinema ziklo berria.

 Lola Arrieta eta Fernando Mikelajauregui ariko dira aurkezle eta moderatzaile lanetan, Aiete Kultur Etxean.

 Atzo, Osteguna, 19:00etan Flauberten Madame Bovary eleberria izan zuten ardatz.

 Gaur, Ostilarean, Vincente Minelliren Madame Bovary filma proiektatuko dute 18:45 ean.

“Emma Bovary” de V. Minnelli

Presenta: Fernando Mikelajauregi

 Adapta la novela “Madame Bovary” (1856), de Gustave Flaubert. Se estrena el 25-VIII-1949

 La acción dramática tiene lugar en las localidades de Tostes (hoy Tôtes), Yonville y Rouen (Normandía), a lo largo de unos 6 años, entre finales de 1840 y agosto de 1846, con un prólogo y un epílogo situados en enero de 1857. Emma Roualt (Jones), hija de un modesto granjero de Tostes, recibe una esmerada educación en un colegio de monjas de Rouen.

 Aficionada a la lectura de novelas románticas, desarrolla una activa y fantasiosa imaginación y una tendencia a dar mucho valor al sexo y el romance. A los 20 años contrae matrimonio con el médico rural Charles Bovary (Heflin), con el que se traslada a Yonville, donde nace la hija de ambos, Berta. Emma es soñadora, fantasiosa y ambiciosa (rebelde a su modo). Anhela vivir rodeada de comodidades, atenciones, relacione sociales y prestigio. Charles, viudo, casado en segundas nupcias con Emma, carece de ambición, se siente a gusto en la rutina de su vida monótona y acepta de buen grado el prestigio social que se otorga al ejercicio de la profesión de médico rural.

 El film suma drama, romance y crítica social. Resume y adapta la novela original con una fidelidad superior a la habitual en otras obras de Minnelli.

 Dentro del conjunto de novelas protagonizadas por una mujer, sobresale de modo destacado y compite con “Anna Karenina” –objeto de nuestro próximo encuentro el 10 y 11 de marzo- por las posiciones de cabecera en nivel de recuerdo, conocimiento y valoración.

 Es la primera novela que publica Flaubert y la que, según historiadores de la literatura, inicia el movimiento de la llamada novela realista, preocupada por construir personajes y plasmar situaciones conformes a las pautas de la realidad. El film se beneficia de esta circunstancia y, además, la aprovecha para construir un relato que refleja la realidad con sinceridad y convicción.

Aiete. La tertulia por Lola Arrieta

El ciclo de Literatura y Cine que se viene desarrollando en Aiete se centra durante este primer trimestre del 2011 en el análisis de tres obras cuyas protagonistas se han convertido con el devenir del tiempo en personajes clásicos universales.

Si en el mes de enero nos centramos en el estudio de La princesa de Cleves de Madame de Lafayette y vimos la adaptación libre que de la novela hace Manuel de Oliveira, este mes de febrero nuestra tertulia girará en torno a Madame Bovary de Gustave Flaubert, novela escrita en 1856, llevada al cine en diferentes ocasiones. Entre las adaptaciones destaca la que el director Vincente Minnelli realiza en 1949,  por lo que la hemos elegido para nuestra proyección.

Si la novela de Madame de Lafayette parecía querer ponernos en guardia ante los peligros y riesgos del amor, dos siglos más tarde, Flaubert va a crear una heroína que camina en la dirección contraria, que va a buscar con pasión a lo largo de su existencia ese amor ideal, con mayúsculas, de cuya existencia sabe por las lecturas románticas que han llenado su infancia y su juventud, y que ella se empeña en hallar en esa Francia profunda a la que pertenece.

Emma es una inadaptada a su entorno, a su matrimonio, a su maternidad. Su imaginación le ayuda a salir de la Normandía enfangada y a elevarse en la búsqueda de ese ideal de amor romántico. Pero fracasará y sólo en el último momento se dará cuenta de lo vano de su empeño. Son esos versos que recita el ciego ante Emma agonizante los que nos dan la clave de la historia.

“A menudo un buen día de calor

le hace a la niña soñar con el amor.”

Madame Bovary es una historia de amor triste y grandiosa, como lo es la novela que analizaremos en nuestra próxima tertulia, Ana Karenina, de León de Tolstoi, y su empeño, su búsqueda, la de Ana y la de Emma, ¿no son acaso la de cualquier ser humano, la de nosotros mismos, aunque estemos alejados de ellas en el tiempo y en el espacio?

“Madame Bovary soy yo”, respondía Flaubert cuando le preguntaban por la identidad del personaje que había creado, apuntando hacia su fuerza y universalidad. El tiempo le ha dado la razón