Una explosión de juego y maestría en los jardines del palacio de Aiete

Jesuitinas de Donostia tienen entre sus lemas este de Gustavo Flaubert.

La vida debe ser una constante educación».

Los del ciclo de Literatura y Cine de Aiete, en la tertulia del 10 de febrero de 201, tuvimos entre las manos la obra más conocida de Flaubert, Madame Bovary. Había pasado un mes desde la inauguración de la Casa de Cultura

El claustro del colegio de las Jesuitnas profundiza, con este eslogan, en la vida como constante educación y la extiende a los hitos de la zona. Estuvieron en Katxola, cuando se podía; ahora en los jardines del palacio ¡Qué lugar más apropiado para aprender jugando, rodeados de salud y de un otoño dorado!

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