Aumenta la frecuencia del 35 y mejora el servicio en Aiete de la 45

Mejorar la frecuencia del 35, a cada media hora, es una vieja reivindicación de la vecindad de Aiete, especialmente de la gente que vive en el entorno del paseo de Oriamendi

Los cambios en la línea 45 benefician a los vecinos de Pagola

Todas esta propuestas fueron aportadas por Baltasar de la Hera, de Lantxabe, en la última reunión del Consejo de Movilidad de la Ciudad y, aunque el responsable de Dbus, en dicho Consejo, puso muchos reparos a las ideas de Baltasar, finalmente Dbus analizará y debatirá en su Consejo de Administración del próximo miércoles, la propuesta para mejorar la frecuencia y recorrido de las líneas de autobús 35 y 45, entre otras.

Queda pendiente que la 23 y 32 puedan ampliar su itinerario por la calle Borroto-Etxadi

La Compañía del Tranvía propone, entre otras medidas, reducir a la mitad el tiempo de espera de la línea 35, que conecta la zona de Arriola y el Antiguo con Aiete, Miramón, Policlínica y Hospitales. Así, los autobuses circularían con una frecuencia de 30 minutos los días laborables, en lugar de los 60 actuales. Este autobús haría además un nuevo recorrido para conectar Errotaburu y Lorea con Aiete, Miramón y Hospitales. La aportación sería de 164.000 euros y los viajes anuales previstos 90.000.

La Línea 45 ‘Estación Renfe-Bus-Antiguo-Aiete’ incorpora un nuevo recorrido para dar servicio adicionalmente a la calle Andoain y a Pagola. De esta forma se conectaría Pagola con el Antiguo y con el centro y las estaciones de Renfe y Dbus.

La Línea 46 de Morlans -que hoy, a falta de la puesta en marcha del funicular Aiete/Morlans, no utilizan los viajeros de Aiete- ampliaría el recorrido de la línea que conecta Katalina Eleizegi y Morlans directamente con el centro. Un microbús conectaría Morlans y San Antonio con el centro, concretamente con la Avenida de la Libertad, circulando por Easo y San Martín.

De hecho, Dbus propone ampliar el trayecto de esta línea para que sirva también para dar servicio a los vecinos de Caserío Parada, San Antonio, Montesol y Luis Pradera, para los que en principio se había contemplado habilitar un taxibús a demanda. La línea pasaría a denominarse Morlans- San Antonio y conectaría las dos zonas con el centro con una frecuencia de 60 minutos, frente a los 30 actuales. Dbus apuesta por este cambio porque, a pesar de la reducción de frecuencia, los vecinos de Morlans quedarían directamente conectados, además de con el centro, con Gros, Ategorrieta y Herrera, cambio de frecuencia a revertir cuando de servicio a los usuarios de Aiete. Estas modificaciones podrían entrar en funcionamiento en el primer trimestre de 2019, una vez finalicen las obras de ampliación de Cocheras.

Otra de los empeños de Baltasar de la Hera -tenacidad pública y notoria puesta de manifiesto en los medios de comunicación- se refiere a las marquesinas en las paradas de los autobuses; pues bien, se renovará un tercio de las marquesinas en 7 años.

Las paradas de autobús se van a someter a un importante lavado de cara. Dbus prevé poner en marcha en 2019 un plan de renovación que contempla cambiar en los próximos siete años un total de 110 marquesinas, lo que equivale a un tercio de las que existen. La renovación será paulatina, a una media de dieciséis por año.

Como conminaba Baltasar, el plan llega tras un análisis del estado de estas infraestructuras en el que se ha puesto la mirada en el estado de la estructura y de la pintura, y la presencia o ausencia de óxido en las mismas. El objetivo es que el plan se ponga en marcha en 2019, para lo que Dbus lanzará un concurso público en el que, además de incluir esta actuación, se sacará a licitación la gestión a quince años del mantenimiento y la explotación publicitaria de las paradas de autobús.

El diseño de las nuevas marquesinas seguirá una línea similar al modelo más actual de las que hay instaladas en la ciudad.

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