El pasado año 2016 se cumplían 100 años del nacimiento del escritor italiano Giorgio Bassani ( Bolonia 1916- Roma 2000). Con motivo del centenario, las universidades Sapienza de Roma, la Sorbonne Nouvelle de París, el Ayuntamiento de Ferrara y otras entidades como Rai Cultura o la sección de Ferrara de Italia Nostra, organizaron distintos actos de recuerdo y homenaje al escritor y su obra.

Leyendo los programas de las actividades llevadas a cabo destacaríamos en primer lugar la vigencia de la obra literaria de Bassani, pero, a la vez, deberíamos observar que, a día de hoy, se valora también al hombre, en concreto su vida de compromiso antifascista y en defensa de los valores culturales en su sentido más profundo.

Nacido en una familia de la burguesía hebrea acomodada de Ferrara, vivirá en esta ciudad su infancia y juventud, siendo Ferrara también escenario y protagonista de lo mejor de su narrativa. En sus años en la Universidad de Bolonia inicia, de la mano de Carlo Ludovico Ragghianti, su compromiso político antifascista; al mismo tiempo, sus primeros pasos literarios serán en el campo de la poesía, siendo Historias de astrolabio la recopilación de su producción poética de estos años. En 1943, es encarcelado en Ferrara durante unos meses por sus actividades en contra del gobierno de Mussolini y tras su liberación, marchará ese mismo año a Florencia y luego a Roma, donde vivirá ya de forma permanente.

Será después de la guerra, estando en la dirección de la revista literaria Botteghe Oscure, y alejado de Ferrara, cuando empiece a publicar sus primeros relatos: Lida Mantovani (1948), El paseo antes de la cena (1951), Una lápida en Vía Mazzini (1952), Los últimos años de Clelia Troti (1954) y Una noche del 43 (1955). En 1958, estando en la Editorial Feltrinelli, aparece una de sus obras más valoradas, Las gafas de oro; en 1962, El jardín de los Finzi-Contini le supondrá su consagración a nivel internacional y en 1968 aparecerá su última novela, La garza, impresionante relato que narra un día en la vida de un hombre acabado y desesperanzado.

A partir de ese momento, el escritor va a iniciar una ingente tarea de corrección y revisión de toda su obra narrativa dando origen a lo que se conoce como La novela de Ferrara, cerca de mil páginas divididas en seis libros, y cuyas historias presentan en común un tiempo, las décadas de los 30 y los 40, una ciudad, Ferrara, unos personajes y un mundo que ya no están pero que Bassani se empeña en recordar en un auténtico esfuerzo de memoria.

En Las gafas de oro, un narrador, del que no sabemos su nombre, cuenta en primera persona la historia de Athos Fadigati, prestigioso médico de Ferrara, hombre culto y refinado que vive con discreción y en silencio su homosexualidad. Pero todo cambia cuando Fadigati conoce al joven Deliliers, estudiante que va a abusar del médico convirtiéndole en su víctima. El narrador, un joven estudiante hebreo, presiente que, en breve, la cruel persecución impuesta por las leyes raciales va a a marginalizar y destrozar la comunidad a la que pertenece y esta circunstancia hace que los dos personajes se acerquen y se comprendan.

En 1960, Florestano Vancini llevó al cine uno de los relatos de Bassani, La noche del 43. Para Vancini, también de Ferrara, se trataba de su primer largometraje y contó para el mismo con la colaboración de Pier Paolo Passolini como uno de los guionistas.

Como el título indica, la película nos sitúa en aquella larga noche del 43, en Ferrara, cuando tras aparecer muerto un dirigente fascista de la recién creada Republica Social Italiana, la venganza y la muerte caen sobre los ciudadanos, siendo arrestadas 74 personas y once de ellas son asesinadas junto a los muros del Castillo Estense.

In memoriam.