La ola de tertulianas y tertulianos desborda la Casa de Cultura de Aiete

Una tertulia multitudinaria, orientada por Lola Arrieta, rinde tributo a García Márquez, más próximo que nunca.

Agotados los 70 cuadernos  que Lantxabe prepara para la tertulias, con la ayuda- que se quedó corta- del Centro Cultural, nueve decenas de personas acudieron ayer a la tertulia “Periodistas y escritores” para asistir a la deconstrucción que en estas sesiones, de intensa literatura integral, Lola Arrieta prepara para lo que es hoy, al cabo de once años, una especie de círculo de humanidades de Aiete

Si cuando hablamos de creatividad, las obras técnicamente más perfectas, son aquellas en las que las personas ponen los cinco sentidos, cuando decimos Arte, el creador aporta un sexto sentido, un conocimiento extrahumano, una sabiduría propia que tienen unos pocos seres privilegiados, y Gabriel García Márquez es uno de ellos, tiene ese don único, marcado por una categoría especial de hacedor arte literario -incluido el periodismo que él practicó-

Y las y los donostiarras, hablando en términos adjetivales, que ayer se acercaron masivamente a Aiete, fueron movidos por una concatenación de acontecimientos:

Las charlas de Arrieta tienen decenas de seguidores, es una profesora fiable, reconocida en los ambientes culturales de la ciudad, y muchas personas, los primeros o segundos jueves del mes, se prepararan para acudir a sus amenas, cómplices, detalladas, doctas, documentadas presentaciones de sus tertulias, dotadas de un gran trabajo de documentación e investigación.

Pero ayer esa capacidad de convocatoria se multiplicó por el atractivo de una figura universal, García Márquez, tocada por los dioses del mundo literario; convocatoria, a su vez enardecida, por su novela “Crónica de una muerte anunciada”, relato que habían leído, prácticamente, todas las personas que acudieron a la cita, y que, para los reunidos, en su mayoría, es la mejor novela de Gabo, quizás la principal novela de las tertulias de Aiete y, si acaso, la mejor de todas las narraciones escritas (al menos en castellano)

El resultado fue una viva sesión, salpicada de gestos y palabras de complicidad y bienestar, en la que Lola estuvo singularmente inspirada… y Gabo recuperaría la mejor sonrisa de persona comprometida con la literatura y la condición humana.

Un comentario en “La ola de tertulianas y tertulianos desborda la Casa de Cultura de Aiete

Responder a OstaixkaCancelar respuesta