3 comentarios en “Tristeza del 2016 como insustancial y prescindible

  1. Elena Claveras Arteaga

    Yo también tuve ocasión de asistir la obra “Sueño de un noche de verano” en Cristina Enea y no puedo esta más en desacuerdo con la opinión del señor Julián Sánchez.
    Seguramente él conoce la obra mejor que yo pero para mi fue una forma de acercarme e interesarme por ella.
    El hecho de que la cena sea anterior a la representación, me permitió disfrutar de las dos cosas.
    El menú era como un para un “banquete de bodas tradicional”.
    Los acotes estuvieron magníficos teniendo en cuenta la dificultad del texto, el lugar, la ambientación y que representaban la obra tanto en euskera como en castellano.
    A mi me encantó y ojalá se hagan más propuestas de este tipo.

    Responder
  2. Irasuegi

    Julán no pone en duda la buena voluntad de autor, autores y público: critica la representación desde su punto de vista, como espectador.
    ¡Qué envidia nos da no poder opinar ni sobre la obra, ni sobre la cena de boda medieval!
    En época de trasparencia ya nos gustaría saber, grosso modo, quiénes han sido los elegidos.
    ¿Los mismos que solemos ver entre bambalinas en el jazz?
    No llegamos ni a la repesca de internet (…Y lo intentamos desde el primer segundo!)

    Responder

Deja un comentario