Ante la inminente licitación de las obras del metro de Donostia, el malestar de muchos vecinos del barrio de Aiete se ha puesto de manifiesto y aseguran que «no se han atendido las propuestas y alegaciones presentadas por la asociación de vecinos» para el paso del suburbano por el barrio (ver pestaña principal en la web)

La asociación Lantxabe ha participado en las reuniones de la ciudadanía para proponer una alternativa al proyecto, «planteando nuestras hipótesis, pero tampoco han sido atendidas. Y eso que nuestra coincidencia con sus críticas es total. La idea que añadimos a las críticas de esta plataforma ciudadana es que puestos a mejorar el trasporte público en Donostia, en vez de agujerearla, aprovechar lo construido para comunicar Aiete con el mundo. Eso es lo que se ha hecho con el topo de Donostialdea o con los ferrocarriles de Bilbao», aseguran.

Aiete no tendrá metro, de momento, pero sí ascensor

Y es que desde 2005, los vecinos de Aiete, reclamaban un ascensor que les comunique con la ciudad llana. Aiete es un barrio que queda incomunicado con el resto de Donostia y «ese derecho lo tienen todos los barrios altos de más de 15.000 habitantes de Euskadi y el de Aiete tiene más residentes que la mayoría de los pueblos de Gipuzkoa», dicen.

La mayoría de los partidos políticos con representación municipal, en la última campaña electoral señalaban como prioridad el ascensor para Aiete. «Ha habido que recordárselo, pero, por fin, el ascensor ha entrado en los presupuestos municipales del 2016», recuerdan.

La parada de metro no sería costosa, ni desde el punto de vista económico, ni del técnico

En Aiete siguen reclamando «el derecho a ciudad (definición que debemos a Henry Lefebvre) y añadimos al ascensor, como derecho ciudadano al trasporte público y a la accesibilidad, una parada de metro que dé servicio en Aiete». Para ello habría que unir «una finca pública que linda con los jardines del palacio de Aiete y Casa de Cultura, con el actual trayecto de Euskotren Lugaritz-Amara».

Para los técnicos de Euskal Trenbide Sarea, la construcción de esta parada de metro «no ofrece ninguna dificultad, y su coste no será ni la décima parte de la de Intxaurrondo o la de Alza». «El metro no puede ser exclusivo para los que viven en el centro o Altza o Intxaurrondo, a no ser que se quiera hacer en San Sebastián dos categorías de ciudadanos», explican molestos.

La propuesta que figura en su planteamiento es unir Aiete, a través de la línea 1K de Euskotren, con Añorga, Lugaritz, Amara, Anoeta, Loyola, la estación de Intxaurrondo y toda la provincia. «El ciudadano común de Donostia y de la provincia disfrutaría, con nosotros, de los privilegios de los jardines y de los bosque de Aiete y de Miramón».

«Estamos esperando la respuesta a las alegaciones que Lantxabe presentó, en tiempo y forma, a la resolución de 15 de mayo de 2015, de la directora del Transporte, para el tramo Lugaritz-Easo del metro de Donostialdea. Asimismo, esperamos respuesta también a la carta enviada el 16 de julio a Ernesto Gasco, teniente alcalde», recuerdan desde la asociación

Gorka Larrumbide

Diario Vasco