Pedro Lazkano mima la pista del juego de bolos ya terminada

1965El día 12 será un día grande en las fiestas del barrio de Aiete

En la foto de abajo podemos ver el nuevo bolatoki terminado y Pedro cuidando la pista, preparada para el campeonato. Se ve también la caja de la toka.

El juego de bolos lo llevaron los canteros vascos a El Escorial. Tiene semejanzas con el que se juega en Alemania, y en zonas rurales de Suiza, Holanda y Bélgica.

Aunque Manuel Machain es referencia como jugador de toca, fue también un extraordinario jugador de bolos, ganador del campeonato de España de Bola Toki, en los años 1950 y 1952.

El deporte rural vasco se ha practicado desde el asentamiento de la población en caseríos. El Caserío era una unidad de explotación autosuficiente, no existía la especialización y por tanto el casero, se veía obligado para su subsistencia a trabajar diversas tareas, desde cortar la leña que necesitaría para protegerse del invierno y cocinar, hasta segar los campos para alimentar su ganado; desde cargar importantes fardos de heno, hasta arrastrar pesadas cargas con la única compañía de sus bueyes, cuando no en solitario. Este es el origen del aizkolari, del segalari, del harrijasotzaile, de las idi-probak, de las gizon-probak. Cómo acaban derivando en deporte es tan sencillo como lógico; cada Baserri trataba de demostrar ser el más rápido y el mejor, trataba de dejar lo más alto posible el nombre de su Caserío, y en consecuencia de su familia, no en vano la familia toma por nombre el de su casa. Enseguida surgía el desafío entre dos baserris, entre dos familias.

nuevo

Otros deportes, más colectivos, se se implantaron más tarde como el juego de bolos o de toka. Y después de la guerra el fútbol, el baloncesto, balonmano. La incorporación de los deportes modernos coincide con el auge de la industrialización en una sociedad competitiva, que poco a poco va arrinconando y relegando a un segundo plano deportes como este de los bolos o la toka, que nos proponemos recuperar para el barrio por su sencillez y competiitividad.

Deja un comentario