La vecindad pide un debate público, serio, sosegado

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Veinte de asociaciones de vecinos de Donostia, todas las que actualmente funcionan en los barrios, se unieron ayer para ofrecer una rueda de prensa conjunta en la que rechazaron la creación de cuatro distritos para Donostia, como está previsto que apruebe el Pleno ordinario del día 30.

Los representantes de las entidades pidieron a los partidos de la oposición -PSE, PNV y PP- que retiren del orden del día plenario su propuesta de reglamento, que acordaron hace un mes después de que el asunto haya estado debatiéndose durante toda la legislatura, y antes también, sin que se produjeran avances concretos. El acuerdo entre los tres grupos contempla dividir la ciudad en cuatro grandes distritos, empezando por el de la zona este que englobaría Altza, Intxaurrondo, Bidebieta, Ulia y Ategorrieta. Este se pondría en marcha en esta legislatura, mientras que los otros tres se quedarían para la próxima.

Sin embargo, la idea, que no cuenta con el apoyo del Gobierno de Bildu, tampoco ha sido del agrado de las entidades vecinales, que negaron ayer que la puesta en marcha de distritos en Donostia sea una obligación legal, tal y como se cree. De hecho, el pasado año, un informe jurídico elaborado por el secretario del Ayuntamiento de Donostia para saber si era legal crear solo un distrito para Altza aseguró que esta posibilidad “no contraviene la ley”, aunque añadía que era “discutible” que crear una única demarcación sirviera para cumplir “el mandato legal” de la conocida como Ley de Grandes Ciudades.

Las asociaciones vecinales, por su parte, ponen en duda que sea obligatorio crear distritos en Donostia y consideran que es opcional hacerlo ya que, de hecho, no se han llevado a cabo en más de diez años, desde que se promulgó la ley.

En concreto, los representantes de las asociaciones pidieron “la apertura de un debate público, serio y sosegado sobre cómo mejorar la eficacia en la gestión de la ciudad y cómo acercar las instituciones a los barrios y garantizar la participación de la ciudadanía en las decisiones”. Asimismo, pidieron al Ayuntamiento la creación de “instrumentos de participación” donde la ciudadanía pueda opinar sobre temas “estratégicos” de esta ciudad.

Los representantes de las entidades de los barrios rechazaron la “democracia vertical” que, a su juicio, subyace en el reglamento de distritos propuesto por la oposición y prefirieron no pronunciarse sobre si la creación o no de distritos pudiera ser objeto de alguna consulta ciudadana, como las que están previstas en los planes del Gobierno de Bildu, presentados recientemente con el objetivo de fomentar la “democracia directa”.

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