La zona de Katxola y el anfiteatro-frontón se impone como una de las entradas principales al KATXOLABosque de Miramón.  Se debe conformar como un punto preponderante dentro de la rehabilitación del Bosque, constituyendo además una zona de estancia y juegos.

Es un acceso próximo a los barrios de Ayete y Oriamendi y tenemos el compromiso de consolidar el caserío como centro de interpretación de Miramon Basoa. (Por ejemplo, es un lugar adecuado para la observación de las webcam distribuidas en el bosque)

El caserío Katxola es una muestra de las actividades dedicadas al sector primario hasta muy avanzado el siglo pasado que se desarrollaron en el entorno del enclave, previas a la creación del parque tecnológico. El caserío supone un vínculo etnográfico muy importante y una buena muestra del activo pasado de la zona.

Por eso decimos que hay que potenciar el caserío Katxola y ponerlo en valor para reforzar la personalidad de la zona.

Las actividades agrícolas con las que se relaciona el caserío son una transición entre el bosque y los caseríos primigenios y la modificación posterior  en los límites actuales del Bosque de Miramón.

La asociación de vecinos de Aiete (Lantxabe) está desarrollando un programa de actividades relacionadas con la manzana y la sidra llevadas a cabo en Katxola.

Se trasladó el tolare del caserío Munto -ampliamente conocido en la ciudad- a Katxola. Este tolare ha vuelto a triturar la manzana, cuyo mosto ha fermentado en las kupelas, que también procedían de Munto y, finalmente, las gentes del lugar han podido celebrar el característico “Txotx”. Con una particularidad, las manzanas prensadas procedían del vecino Hernani, de la sidrería Akarregi.

Es muy interesante la propuesta de implantar en los alrededores de Katxola un  bosquete de manzanos de variedades distintas, todas autóctonas y de  raigambre en la zona, para poder establecer un ciclo completo de trabajo en el caserío. Katxola produciría manzana/produciría sidra.

Las laderas lindantes con el caserio Katxola, tanto al sureste como al noroeste se presentan propicias para el fin que se propone, además de ofrecer a los vecinos de la zona un bosque urbano de estética bien diferenciada a los habituales jardines escenario presentes en la zona (jardines de Aiete entre otros).

Su orografía y su orientación no presentan complicaciones para éste fin, y el conjunto aportará ese carácter de elemento de transición que buscamos en una frontera muy marcada entre el bosque preexistente y las casas y chalets lindantes con el parque en ésta zona urbanizada.

Las variedades elegidas para la plantación buscarán compendiar las antiguas destinadas para sidra, junto con un buen muestrario de las muchas manzanas de mesa presentes en nuestro pasado agrario.

Otras propuestas

Las nuevas laderas de Katxola pueden ayudar a solucionar un problema existente ahora referente a la pérdida de visuales más que interesantes desde la terraza adyacente al caserío y que se abren a todo el conjunto de las torres de Arbide, el Kutxaespacio y el BCC, además de una evocadora vista del valle del la erreka Pakea. ¿Qué tal abrir una serie de ventanas en la vegetación que enfoquen directamente hacia las visuales elegidas, para establecer así referencias y ubicaciones espaciales?

Junto al caserío Katxola, en general las plantaciones no se adecuan al carácter del lugar y se observa la presencia de plantaciones del Acer Freemani Autum blaze, de color muy rojo en otoño, junto con Quercus robur Koster, especie ornamental muy fastigiada del roble y algunas cordylines en la zona baja que no tienen demasiado que ver con la zona.